Vía: El Mundo


Mariano Pavone abrió el marcador en los primeros minutos de juego y despertó la ilusión "millonaria" de permanecer en Primera División. Pero en la segunda etapa, lo empató Guillermo Farré y decretó la pérdida de categoría


LA CAÍDA DE UN GRANDE

Las tres malas temporadas que arrastraba el club 'Millonario' lo llevaron a perder la categoría, generando reacciones violentas y de dolor entre sus seguidores, quienes al finalizar el encuentro expresaron todo su dolor y toda su ira tratando de golpear a los dirigentes del equipo que se encontraban en los palcos del 'Monumental'.

En sus 110 años de historia el club que orienta Juan José López, se va a la B por primera vez. Jugadores, dirigentes y los hinchas lloran el descenso de uno de los más grandes de Argentina y del Continente.

Entre los logros de River aparecen dos Copa Libertadores, 33 títulos nacionales, 10 más que el escolta y archienemigo Boca Juniors, además de una Copa Intercontinental, equivalente ahora al Mundial de clubes.


El viento Pampero sopló violentamente sobre los rostros de los jugadores del River Plate, que ya mascaban la tragedia del descenso a Segunda División tras 110 años de soberbia de equipo ganador. Era como recorrer el canal del infierno del propio Río de la Plata. Las carcajadas de la Boca se escucharon en todo Buenos Aires. Pero las risas se tornan sarcásticas porque no volverán a jugar el año próximo contra su eterno rival.
Cualquier bonaerense tendrá presente la tragedia de la puerta 12 del Monumental de River Plate, cuando murieron 71 personas a la salida de un lance entre River y Boca en 1968. Aquella Puerta de la Muerte fue renombrada como Acceso L, que es la misma de la desesperación de los forofos de River. La mayoría de críticos se han inclinado a pensar que es el triunfo de la conjunción de un equipo ante el perverso individualismo de estrellas en declive. El triunfo del fútbol asociación frente al fútbol anárquico. Es una vieja disputa, pero excesivamente maniquea. Simplemente, el fútbol es así.


Y el fútbol es un juego. Pero los periódicos recuerdan que el héroe, el entrenador del Belgrano de Cordoba, hasta hace pocos meses no era más que el camarero en un bar para poderse pagar el piso. A Ricardo Zielinski le llaman ya el técnico heavy y como jugador le llamaban el ruso. Ahora sólo escuchamos lamentaciones del River Plate. Aflora ese espíritu victimista, de humor negro y de diván psicológico. El equipo pasa a manos psiquiátricas, que es muy común en Buenos Aires. Es el corazón del fútbol argentino que siempre palpitará a ritmo de tango. De tragedia, como las letras de sus canciones.
Ángel Cappa, que fue defenestrado por Passarella, podrá contar cómo fue el principio del fin de un equipo que era el "millonarios"y ha pasado a ser mojado y mojado por los miedosos agentes de seguridad del Monumental. Ya no eran los Borrachos del Tablón- nombre de la barra brava del River- sino Los Mojados del Tablón. Una tragedia. La peor para un equipo que está entre los diez primeros clubs del mundo con más socios.

Desde Ajayu.org, nuestro más sentido pésame.
Una desgracia para nuestras apuestas u__ù