Es atemorizante para los rivales de México y para quienes ronden por él en las noches. El Estadio Azteca es un inmueble que va más allá de ser la sede por excelencia de la selección mexicana. Su poder se extiende cuando se habla de la altura de la Ciudad de México, pero su misticismo y valor aumentan cuando se conocen las leyendas urbanas que hay detrás de él.


El Estadio Azteca ha albergado triunfos como la Copa Confederaciones de 1999 del Tri ante Brasil, el campeonato mundial sub-17 del 2011 y múltiples encuentros que los guiaron a no faltar a ningún mundial desde el incidente de los cachirules en 1990, pero todos esos logros han sido encima de historias que algunos podrían catalogar de fantasmagóricas; leyendas que al mundo le gusta contar a pesar de no tener la certeza total de que hayan sucedido, sólo versiones de gente que se viste de confiable.

Se cuenta que el Estadio Azteca, a 46 años de su inauguración, tuvo algunos eventos desafortunados en los trabajadores. Corría el año de 1962 y se trabajaba en la ardua construcción del inmueble entre varias decenas de hombres. Mientras se evaluaban varios aspectos a considerar para la resistencia de éste y mientras comenzaba a tomar forma el estadio, se dice que varias personas murieron y otras tantas desaparecieron.


Continuaban las instrucciones de los arquitectos. Aparentemente algunos de los trabajadores cayeron en los fosos de construcción. También se dice que se enviaban grupos de gente a observar o recoger materiales necesarios y éstos jamás regresaban, y no sólo eso, sino que se dejaba de saber sobre su paradero.

A partir de ahí, los demás encargados de la construcción y quien actualmente tiene la oportunidad de estar por las noches dice que se escuchan ruidos en forma de lamentos y solicitudes de ayuda. Se ha llegado incluso a asegurar que a altas horas de la noche se pueden apreciar cánticos de un sector de personas alentando aunque no haya un partido próximo.

Existe otra leyenda que asegura que se aparece un niño buscando ayuda, llegando hasta a provocar una sensación deasfixia. Se dice que ese niño murió aplastado por la multitud en un túnel de acceso tras una avalancha humana y desde ahí permaneció su espíritu.

La última leyenda, que para muchos resulta ser la más aterradora, se remonta a la época de los Aztecas. Se dice que precisamente en el espacio que ocupa hoy el Coloso de Santa Úrsula era un cementerio sagrado para ellos. Se ha llegado a hablar de que la "desaparición" de trabajadores ocurrió por esto y porque los arquitectos hicieron caso omiso de quienes llegaron a advertirles que estaban construyendo sobre un cementerio.

Todas estas historias repletas de misticismo son leyendas urbanas que han alimentado la historia del Estadio Azteca, sin embargo no se puede asegurar con certeza que hayan existido en su totalidad. Sólo unos testigos y amantes de las fuerzas sobrenaturales han podido profundizar sobre lo que serían los relatos más oscuros sobre los que fue construido el estadio más emblemático de México.



espero les haya gustado  -noo-

Ultima modificación: Octubre 29, 2013, 09:36:40 PM por Akemi Usagi